sábado, 15 de mayo de 2010

Pérdida...




Si has perdido tu nombre,
recobraremos la puntada de las calles más solas
para llamarte sin nombrarte.







Si has perdido tu casa,
despistaremos a los guardianes de la cárcel
hasta dejarlos con su sombra y sin sus muros.





Si has perdido el amor,
publicaremos un gran bando de palomas desnudas
para atrasar la vida y darte tiempo.


Si has perdido tus límites,
recorreremos el cruento laberinto
hasta alzar otra forma desde el fondo.









Si has perdido tus ecos o tu origen,
los buscaremos, pero hacia adelante,
en el templo final de los orígenes.




Solamente si has perdido tu pérdida,
cortaremos el hilo
para empezar de nuevo.


Roberto Juarroz